miércoles, 17 de junio de 2009

Roto y compuesto



Recuerdo que a finales de 1991 estaba un sábado haciendo un curso los fines de semana en el centro de Barcelona y en la media hora que nos daban de descanso me di un atracón a caminar y me planté en la tienda Norma Cómics que abrió en la calle Rosselló y ya hace tiempo que no existe. Allí pude hojear el Tótem el Cómix número 62, con una portada perturbadora y provocadora de Toshio Saeki, en que se publicaba nuestra historieta Rómpeme. Tengo para mí que ese fue uno de los momentos más felices de mi vida o, al menos, como tal lo conserva mi memoria. El cumplimiento de un deseo largamente albergado: publicar un guión en una revista editada profesionalmente. No lo compré (supongo que si no lo hice es porqué esperaba que el editor le pasase mi ejemplar a Martín durante la semana entrante; desde entonces debo decir que he comprado en puestos de segunda mano tres o cuatro ejemplares), pero regresé henchido de felicidad al curso, sin haber alimentado el cuerpo con el almuerzo pero sí aumentado el ego, que en aquellos momentos me pareció tanto o más necesario que la satisfacción alimenticia.