jueves, 6 de enero de 2011

Low Cost


Colaboro en el libro Perversiones. Breve catálogo de parafilias ilustradas, de lae colección Vagamundos de la editorial Traspiés, con un relato ilustrado por Jorge Fornés (su ilustración es la que aparece en la parte superior de la portada) titulado Clement y Maurice. Pero éste es sólo uno de los relatos que entregamos en la convocatoria abierta que realizó el editor, también incluimos otro relato ilustrado, Low Cost, que fue desestimado ya que sólo podía aparecer un texto por autor. Llevaba una ilustración de Martín Pardo. El relato en cuestión lo podéis leer tras el salto, pero para ver la ilustración que lo acompañaba tenéis que clicar aquí e iréis al blog de Martín Pardo; en lo que es un experimento de post cruzado, ya que en su blog hay una entrada que supone el negativo de ésta. (La imagen de esta entrada corresponde a una crítica publicada por Ana Vega en La Nueva España el 23 de Diciembre del 2010)
Post Scriptum 24 Enero 2011. En el blog  de Perversiones. Breve catálogo de parafilias ilustradas han hecho una entrada con el relato y la ilustración. La podeis ver y leer aquí.
LOW COST

Coger un avión, aunque fuese a las seis de la mañana, para ir hasta la Costa Dálmata durante una semana de vacaciones con unos amigos se le antojaba a Ernesto el regreso al paraíso perdido. Los nervios habían desalojado al sueño de su cabeza y, aunque todavía quedaban cuarenta minutos para que sonase el despertador, no podía dormir. Laura sí lo hacía.

Ernesto, espoleado por el insomnio, le daba muchas vueltas al viaje, a las maletas, a la facturación, al despegue, etc. Se preguntó si al despegar el avión todavía sentiría esa excitación en el pene. A las cinco pasarían a recogerlos Marta y Jesús y los cuatro se encaminaría a un trayecto de cansancio y protocolos de seguridad que los conduciría hasta Rijeka. 

Se propuso despertar a Laura de una manera diferente a la tiranía del despertador. Con unas tijeras de la cocina le cortó con delicadeza sus bragas. Acercó su boca al clítoris y empezó a lamerlo con ritmo de terciopelo. El cuerpo de Laura tardó en acusar el acoso de la lengua de Ernesto. Se movió ligeramente, sin saber todavía a qué se enfrentaba, pero sin negarse a afrontarlo. Ernesto aprovechó para acomodarla con delicadeza.

Ernesto, reducido a su órgano bucal, seguía excitando el sexo de Laura. Y aquella lengua húmeda, caliente, curiosa e infatigable hubiese proseguido su cometido con idéntico entusiasmo de no haber escuchado Ernesto un gemido acompañado de unas palabras, medio pronunciadas en la duermevela del despertar, pero nítidamente escuchadas.
- Oh, Jesús sigue…

Somnofilia: acariciar y realizar sexo oral a una persona dormida hasta despertarla.




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